Dejo aquí estas coplas de pie quebrado o manriqueñas con el tema de la muerte de la Naturaleza anunciada por una campana solitaria desde una espadaña. Viendo lo que nos está ocurriendo con tanto tren de alta velocidad, minas a cielo abierto y supertorres eléctricas llevando miles de kilovatios por encima de nuestras cabezas y montes, he pensado que podrían ser adecuados estos veros. Espero que os agraden.
Salud.
Campana.
Campana que en la espadaña
permaneces tan callada,
silenciosa;
si el cielo no nos engaña
pronto oiremos tu llamada
temerosa.
Nos llegará en el lamento
de tu voz de bronce puro
ya doblando,
el dolor del sentimiento
que irás con toque seguro
pregonando.
¿De quién, dínos, es la muerte?
¿De quién la triste noticia
tan temida?
¿Quién, al cabo, de esta suerte
siente la postrer caricia
de la vida?
-Mirad los campos baldíos,
mirad los pueblos sin gentes,
despoblados;
ved las aguas de los ríos
y los montes y sus fuentes,
asolados.
Si es humana la esperanza
no hay esperanza posible
en este trato,
pues ya esperanza no alcanza
donde alcanza lo increíble
del maltrato.
Así, con la tierra herida,
grito al aire en tristes sones
anunciando
que no es posible la vida
a la vida y sus razones
renunciando.
La desmedida ambición
todo lo acaba y consume
con presteza;
y ha de ser la conclusión
que en muerte así se resume
la certeza.
Cuando gimió la campana
su respuesta de esta suerte
así contando,
nadie la oyó en la mañana;
sólo se la vio a la muerte,
meditando.